Con colores generalizados en los que destacan el blanco, beige, madera y matices en negro.
En esta reforma hemos creado un salón cocina integrados para ganar amplitud y luminosidad. Destaca el color blanco de las paredes y parte de los armarios de la cocina, que combinan con armarios y mobiliario de color madera. El frontal de la cocina y encimera fabricados de cuarzo en tono topo. Se rompe con matices negros en los electrodomésticos y la nevera en acero.
Los muebles del comedor están fabricados a medida, al igual que los muebles de entrada de color madera.
En la reforma del dormitorio que se ve en la galería de fotos se ha hecho un armario empotrado a medida de color blanco. Las paredes rompen en tonos tierra claro (la pared del cabezal de la cama en papel pintado con imitación de piedra). La estructura de la cama también en color beige. Destacan las mesitas de noche en tono madera y sus respectivas lámparas colgantes en negro. Se crea un pequeño espacio de escritorio aprovechando un hueco entre pilares de la habitación.
La reforma de los baños: de tonalidades madera en los muebles, con encimeras negras y accesorios y remates de color negro. Con elegantes espejos enmarcados en negro con luz retroiluminada. Los dos baños van en la misma línea, pero el que conecta con la habitación de matrimonio tiene azulejos blancos hexagonales y suelo porcelánico. El otro baño tiene azulejos en tono beige y suelo también porcelánico.
La iluminación general de la casa está compuesta de ojos de buey de diseño y en algunas zonas se rompe con lámparas decorativas. El suelo general de la casa es porcelánico de imitación madera clara.